top of page

Los 7 valles vitivinícolas de Chile que no puedes dejar de visitar

Actualizado: 26 ene 2021



Por sus características climáticas y geográficas, Chile es un territorio privilegiado para la producción del vino. Pero los chilenos y turistas extranjeros no solo pueden probar una gama muy amplia de marcas, sino también disfrutar de la fiesta de la vendimia, de la tranquilidad de los refugios en las bodegas y la experiencia de conocer de cerca cada etapa de la producción.


Entre las características que hacen especial al vino chileno están los valles vitivinícolas, terruños protegidos por montañas que por su aislamiento permiten climas únicos.


Valles con carácter 

Los valles abarcan toda la zona central del país, un territorio que continuamente se extiende para explorar nuevos terruños. Cada valle ofrece cepas típicas, viñedos, marcas y acontecimientos de enoturismo que les dan su carácter específico.


Al acercarse el otoño, el visitante puede recorrer las viñas y ser testigo de la vendimia, que se desarrolla entre los meses de marzo y junio, cuando la cosecha estalla en una actividad febril para convertir el cuidadoso proceso de cultivo de la uva en el inicio de la producción del vino en las bodegas.


El carácter especial de cada zona obliga a los habitantes de las regiones más apartadas del planeta a aprender a pronunciar palabras difíciles para ellos, como Colchagua, Ñuble o Aconcagua.


De norte a sur

La normativa que regula la producción del vino establece que las marcas deben producirse en un valle específico  y que éste sea indicado en la etiqueta, para impedir que pierdan su identidad.


En los valles  encuentran algunas de las marcas más afamadas en el mundo, como Concha y Toro, Santa Helena o San Pedro, pero también bodegas boutique, pequeñas producciones artesanales, vinos campesinos para consumo regional o  vinos ecológicos. Todo esto genera una variedad casi inabarcable de experiencias.


Enoturismo y festivales

Pero no todo es producción, consumo y exportaciones. También la industria vitivinícola explota una oferta de turismo enológico reconocido internacionalmente. Los paseos por los viñedos y las bodegas representan una industria tan prestigiosa como el vino mismo.


Valles privilegiados

Presentamos los 7 valles vitivinícolas más famosos de Chile y los elementos que permiten distinguirlos:


1. Aconcagua

Se encuentra al norte de Santiago, bañado principalmente por el Río Aconcagua. Se destaca por la viña Errázuriz y por cepas como Cabernet Sauvignon y Syrah. Tiene un clima seco, con suelos arcillosos, que producen vinos frutales y frescos. Se celebra la Fiesta de la Vendimia en la capital, San Felipe, a 90 kilómetros de Santiago.


2. Casablanca

El Valle de Casablanca es uno de los más famosos del mundo. Ubicado entre Santiago y Valparaíso, debe su fama a sus uvas Chardonnay, consideradas las mejores del mundo gracias al clima semi marítimo y la humedad casi constante. El vino blanco Chardonnay es perfumado y de un fuerte color ámbar.


3. Maipo

Las mayores marcas de Chile se encuentran asentadas en este valle desde los inicios de la producción vitivinícola en el país. Aquí están las bodegas centrales de Concha y Toro, el gigante mundial de los vinos, cuyo Casillero del Diablo tiene el nivel de leyenda. El visitante puede vivir una experiencia única al recorrer algunas de las bodegas más antiguas de Chile.


4. Colchagua

Es otro de los valles más tradicionales de Chile. Se ubica en una de las zonas más privilegiadas en términos de terruño, suelos, humedad y lluvias. Bodegas de tradición como Santa Rita fincaron su fama internacional. En esta zona se rescató el Carmenere, una cepa casi extinta que saltó al mundo como una novedad sorprendente.


5. Curicó

El valle de Curicó ofrece una amplia variedad de viñedos grandes y pequeños, que pueden ser recorridos en la Ruta del Vino, creada para los amantes de los sabores únicos y de los paseos rurales. Aquí se encuentra la célebre bodega San Pedro y se producen algunos de los Cabernet Sauvignon emblemáticos de Chile.


6. Maule

El rio Maule le da vida esta zona, donde el vino chileno tiene sus orígenes más antiguos desde antes de la Independencia. El clima es el factor para producir vinos tradicionales que se exportan a todo el mundo, principalmente Cabernet Sauvignon, que en este caso puede reclamar su mayor autenticidad.


7. Itata

Durante mucho tiempo, esta zona fue considerada productora de vinos regionales o campesinos, pero en la actualidad se ubica en la lista de los que no puedes dejar de visitar. Ubicada a 400 kilómetros al sur de Santiago, cuenta con bodegas consideradas entre las mejores el mundo. La zona también ofrece una extraordinaria oferta gastronómica.


Un recorrido sorprendente

Aunque en el mundo el vino chileno es reconocido principalmente las cepas, los especialistas están prestando atención también a la importancia de los valles de producción.

Una exploración por los valles chilenos y sus características enológicas ofrece experiencias únicas a los aficionados, conocedores y simples turistas.

bottom of page